La política institucional vuelve a revelarse como farsa. Comienza el epílogo de una legislatura construida como un plan de marketing, primero teatralizando una reconversión izquierdista, después prometiendo tímidas políticas de apoyo a la clase trabajadora y a los colectivos desfavorecidos, finalmente una escenificación victimista, el aplazamiento sin fecha de todo, telón, risas.
Los medios de masas construyen el relato de la política espectáculo como una serie de televisión, en donde los partidos son los actores del relato y la gente somos meros espectadores sin posibilidad para tomar decisiones de algo que ya está filmado. Crean actores y les hacen interlocutores nuestros sin respaldo social, silencian aquello que les conviene, generan miedo y construyen nuestra historia a base de mentiras y medias verdades. Fabrican falsos consensos y dirigen el debate social de forma circular pues nunca hay finalmente alternativa. El próximo ciclo electoral atado y bien atado, será para los medios de masas el único lugar donde hacer política y a nosotros nos queda contemplar el espectáculo.
Pero la política verdadera está en los centros de trabajo, en las calles, en las organizaciones sociales, en todos los rincones cotidianos. La política verdadera sólo puede partir del debate y el acuerdo de las trabajadoras y trabajadores que conformamos esta sociedad. Sólo nosotros estamos legitimados para ello porque somos lo que hacemos funcionar el país trabajando cada día.
Nos han arrebatado nuestra capacidad de imaginar y construir una sociedad, y la han sustituido por miedo y desánimo. Pero tenemos la responsabilidad histórica de sobreponer la política verdadera a la ideología del odio y la mentira, tenemos que construir tejido social, esperanza, comunidad. Tenemos que hacerlo ahora.
SP CGT – Región Murciana