Autor: Rafael Mondragón
Editorial: Pacarina del Sur (año 7, nº 27, abril-junio)
ISSN: 2007-2309
DL:
Género: Literatura – DIA (Desde el Interés Académico) – Cultura Libertaria
Año: 2016 (1ª edición)
Páginas: 15 (9 x 12’5 cm.)
PDF: SI (sólo PDF) – Pincha abajo para descargar
EN 100 PALABRAS: revisión de la obra teatral “A contramano”, del anarquista argentino Rodolfo González Pacheco, cuyo tema fundamental es el poder de la lectura y el carácter utópico de las bibliotecas. La revisión de las metáforas utilizadas por el autor para describir este poder servirá para articular una reflexión mayor sobre el tipo de sensibilidad construida en la tradición literaria anarquista, así como sobre la ética del cuidado de sí que sustenta dicha sensibilidad. Ofrece también algunos testimonios sobre las primeras representaciones de dicha obra y resalta su carácter heterogéneo, que proviene de su capacidad de trabajar con varios registros sociales y dirigirse al mismo tiempo a varios públicos.
ÍNDICE
01. Resumen
02. Una utopía: la biblioteca
04. Una escritura que habita al mismo tiempo varias patrias: la vida social de A contramano
06. Crónica teatral
10. Vocabulario para una ética del cuidado de sí
11. La fragilidad y el porvenir
13. Notas
_________________________
RODOLFO GONZÁLEZ PACHECO (1882-1949), dramaturgo, director de teatro, periodista y orador argentino, editor del periódico libertario La Antorcha y fundador del "Teatro de Ideas". En 1906 fundó junto con Federico Gutiérrez (un ex-policía pasado a las filas anarquistas) el periódico satírico La Mentira. En 1908 fundó Germinal con Teodoro Antillí; ambos dirigieron La Batalla en 1910. En esos años fue colaborador de La Protesta. En 1911 editó el periódico Alberdi con Apolinario Barrera y fue encarcelado unos meses en el Penal de Ushuaia. Una vez en libertad, fundó los periódicos Libre Palabra con Tito Livio Foppa y El Manifiesto con Antilla. Ese mismo año se embaró para México a colaborar con los magonistas en la Revolución Mexicana; regresó a la Argentina en 1914. En 1917 editó La Obra, periódico de la agrupación anarquista homónima. En 1919 publicó una colección antológica de misceláneas y artículos breves, Carteles, su obra más famosa, en dos tomos. En 1920 fundó otro periódico anarquista, El Libertario y al año siguiente sacó a la calle La Antorcha, que polemizaría con La Protesta por su apoyo al Anarquismo expropiador, particularmente con los que estaban en contra como Diego Abad de Santillán y Emilio López Arango. En 1926 fue condenado a 6 meses de prisión por apología del atentado de Kurt Wilckens, el vengador de la masacre conocida como Patagonia trágica. Luego del golpe de José Evaristo Uriburu fue encerrado en la Cárcel de Villa Devoto durante 8 meses. Fue partícipe activo en las campañas por la liberación de Sacco y Vanzetti y Simón Radowitzky. Fue activista y conferencista en Argentina, Uruguay, Paraguay, Chile, México, Cuba y España, país al que viajó durante la Guerra Civil Española de 1936. Allí dirigió la revista Teatro Social y junto con Guillermo Bosquets fundó la Compañía del teatro del pueblo. En 1938 editó sus Carteles de España. Regresó a la Argentina luego de la derrota republicana. González Pacheco tambien fue uno de los pioneros de la cinematografía argentina, colaborando con Hugo MacDougall en el guion de Tres hombres del río que dirigió Mario Soffici.
JOSÉ RAFAEL MONDRAGÓN VELÁZQUEZ (1983~), doctor en Letras por el Instituto de Investigaciones Filológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en cuya Facultad de Filosofía y Letras es también profesor, y donde se licenció en Lengua y Literaturas Hispánicas. Se desempeña como investigador asociado “C”, adscrito al Seminario de Hermenéutica del Instituto y es miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Ha sido profesor también en las licenciaturas de Lengua y Literaturas Hispánicas, Pedagogía y Estudios Latino-americanos de laFacultad de Filosofía y Letras (UNAM), y en el posgrado de EstudiosLatinoamericanos(UNAM). Ha publicado diversos estudios sobre el pensamiento crítico latinoamericano de los siglos XIX y XX, y sobre las prácticas estéticas de artistas latinoamericanos comprometidos con la lucha por los derechos humanos en dicho periodo, desarrollando una carrera académica que combina la investigación, la difusión y la docencia con una perspectiva que resalta la dimensión comunitaria de las humanidades y las contribuciones de los humanistas en la construcción de una cultura de la paz.