CGT-Murcia denuncia las actuaciones que tuvieron lugar el pasado jueves 8 de noviembre, en las que decenas de agentes de policía tomaban varios bares del Barrio del Carmen de Murcia, de Zarandona y Archena, en busca de personas sin documentación o que tuvieran incoado un expediente de expulsión.
Estos hechos nos producen una gran preocupación, despertarse con la noticia de que continúan y se intensifican las identificaciones basadas en el perfil racial, se selecciona a personas atendiendo a su aspecto físico, se les identifica, e incluso, detiene, alegando un posible incumplimiento administrativo, como es no tener la documentación en regla. Estas redadas racistas vulneran el principio de igualdad y no discriminación, así como la libertad de circulación y uso de los espacios públicos, generando segregación, inseguridad y miedo, así como sentimiento de alarma en la población local.
Desde CGT Murcia exigimos al Delegado de Gobierno que dé explicaciones sobre estos hechos, que no hacen más que promover el equivocado vínculo entre diversidad racial y delincuencia. Exigimos que se hagan cumplir las circulares internas y las sentencias que establecen que no pueden realizarse actuaciones de este tipo, basadas únicamente en criterios étnicos. En esta línea, el Comité de Derechos Humanos de la ONU establece que “las meras características físicas o étnicas de las personas objeto de los mismos no deben ser tomadas en consideración como indicios de su posible situación ilegal en el país”. Y, sobre todo, exigimos que se ponga fin a este tipo de prácticas que criminalizan a las personas trabajadoras migrantes, por el simple hecho de serlo y se adopten medidas para acabar con la nefasta política migratoria que pone en práctica esta Región, retrasos en citas para renovaciones, en entrevistas de asilo, falta de plazas para Menores no Acompañados, ausencia de mecanismos de recepción…
Por un mundo sin fronteras, NINGÚN SER HUMANO ES ILEGAL.